Se parecen a mis deliciosas Galletas Suecas, pero éstas con almendra y tienen fragancia de cítricos. Como la masa tiene menos mantequilla y yema, es un poco más difícil de manejar.

Galletas

Las almendras las remojé en agua caliente por 15 minutos, las pelé y las partí en cuadritos pequeños. De entrada, tuve la intención de meterlas al horno para que quedaran crujientes, pero no fue necesario, al hornear las galletas, quedan doradas.

Al igual que con las Galletas Suecas, utilicé la clara de huevo para que la almendra se mantuviera en su lugar, y la jeringa para colocar en el centro de cada galleta la jalea de albaricoque.

Dirán que soy ideática (a la mejor sí) pero cada galleta la pesé (30 gramos) 🙄 me gusta que queden PAREJITAS, del mismo tamaño.

Igual, debieron de ser 50 gramos para que las galletas quedaran más grandes y la jalea de albaricoque fuera más notoria.

Pero ya saben la teoría de mi madre: entre más chiquitas, se ven más finas. Tons, 30 gramos.

Va la receta.

Galletas

Galletas Polacas de Almendras y Albaricoque

Ingredientes:

180 gramos de mantequilla ligeramente suave
1/8 cucharadita de sal
1 yema de huevo grande
½ cucharadita de polvo de hornear
1/8 cucharadita de extracto de almendras
La ralladura de 1 limón
La ralladura de una naranja
1/3 taza de azúcar
2 ½ tazas de harina
3/4 taza de jalea de albaricoque licuada
1 1/2 de almendras finamente picadas
1 clara de huevo

Galletas

Procedimiento:

Bate la mantequilla y azúcar lentamente. Agrega la sal y ¼ de taza de la jalea de albaricoque. Añade la yema de huevo (una grande o dos pequeñas), el polvo de hornear, el extracto de almendras, las ralladuras de limón y de naranja. Revuelve muy bien un par de minutos y comienza a añadir la harina. La masa se debe de separar del recipiente donde la trabajas.

Debes hacer treinta bolitas.

No olvides que la mermelada de albaricoque debe de ir licuada, para que quede sin grumos. Debe de quedar como jalea porque llenarás una jeringa y no se debe de tapar.

Prepara un recipiente con claras y otro con las almendras partidas finamente.

Sumerge cada bolita en las claras, pásala por las almendras picadas, presionando un poco. Acomódala en una charola bien engrasada o con papel estrella. Aplana con el dedo índice para hacerle un hoyo al centro de cada galleta.

Llena la charola y cuando esté lista, ayúdate con una jeringa y ve poniendo un poco de mermelada de albaricoque en las Galletas de Almendra.

Hornea a 170 grados centígrados hasta que comiencen a dorar.

Una vez más, de mi libro Galletas, recetario internacional.

Laboriosas pero muy ricas.