Anoche cené Garibaldis, un delicioso pan chilango.

Garibaldi

Así como las Guajolotas o los Tacos al Pastor, los Garibaldis fueron creados aquí en CDMX. Para precisar, en la Pastelería El Globo (fundada en 1884), cuyo local entonces se encontraba en la esquina de las calles de Madero e Isabel la Católica, en pleno centro histórico.

Su creador, el sr Tenconi, de origen italiano, le puso ese nombre en honor al italiano Giuseppe Garibaldi, padre de la Italia unificada.

Garibaldis son esponjosos biscochos de mantequilla, cubiertos con mermelada de chabacano y rociados con gragea blanca por encima. Cuando le das una mordida al panecito, te hace Crunch las tres partes

  • lo esponjoso
  • lo ácido de la mermelada,
  • y recién preparado, lo crujiente de las grajeas.

Se pone como referencia la fecha en la que se fundó la Pastelería El Globo (1884) pero en realidad se desconoce cuando salieron al mercado los Garibaldis. Como sea que haya sido, estos han estado por décadas deleitándonos a nosotros los chilangos…

Va la receta.

Garibaldi

Garibaldis

Ingredientes

150 gramos de mantequilla
100 gramos de azúcar
4 huevos
50 gramos de mermelada de chabacano
150 gramos de harina
10 gramos de polvos de hornear
50 ml de leche

Para el acabado

200 graos de gragea blanca FINA
150 gramos de mermelada de chabacano
Capacillos rojos o blancos

Garibaldi

Procedimiento

Bate la mantequilla y el azúcar hasta acremar. Entonces uno por uno añade los huevos, integrando perfectamente antes de añadir el siguiente huevo.

Incorpora la mermelada de chabacano.

Continua entonces con los secos y húmedos. Harina, polvos de hornear – leche. Altérnalos.

Engrasa perfectamente un molde de mantecadas y vacía la mezcla hasta ¾ (yo lo puse sobre una báscula, y le di a cada panecillo 40 gramos a cada panecito).

Hornea a 160-180 grados c hasta que insertes un palillo y éste salga seco (20 minutos aprox.)

La mermelada de chabacano debe de ir licuada o procesada, sin trozos de fruta. Debe de quedar un tanto aguadita para que se pueda untar en los panecillos. Si es necesario, agrega un poquito de agua.

Y, por cierto, no hay forma sencilla de hacerlo. Procura tener todos los ingredientes a la mano, para el montado.

Desmolda los panecillos y deja que se enfríen.

Barnízalos con la mermelada y de inmediato cúbrelos con la gragea blanca.

Acomódalos sobre los capacillos.

Los Garibaldi son unos panecillos deliciosos…y delicados. La mermelada de chabacano provoca fermentación, por lo que no aguantan más de dos días.