Y si, este sábado me tocó ir al mercado de la Dalia. Seguramente esta será de las últimas veces que consigo Flor de Calabaza, ya casi acaba la temporada. Calabacitas minis minis, probablemente seguiré encontrando.

Y bueno, ahora anduve de copiona. Me tocó escuchar que un señor preguntaba por Quintoniles. Pidió medio kilo, y yo me apresuré a preguntarle como los preparaba.

La receta que les presento, sencillita, me la dio este señor que hacía cola a mi lado para que nos despacharan.

Los Quintoniles que compré venían relativamente limpios. Igual saqué como taza y media de raíces. Los sumergí por 15 segundos en agua caliente (mi amiga Rosy dice que es el mejor método para quitar bacterias. Y en una segunda agua caliente volví a sumergirlos y después los coloqué en un colador

En mi libro de Larousse de la Cocina Mexicana señala en el modo de preparación y cocción de los Quintoniles, que «Una forma de conservar sus nutrientes es a través del sudado, donde son cocidas si agua, unicamente con la humedad que contienen en un recipiente bien tapado. También se consumen como un guiso o guarnición»

Los quintoniles y son una clase de “quelites”. El término “quelite” deriva del náhuatl quílit o quílitl, nombre genérico para designar a las hierbas comestibles. El género incluye unas 70 especies, de las cuales 40 son nativas de América. En México y Estados Unidos encontramos un total de 29 especies

Los quintoniles son una fuente importante de vitaminas, minerales, proteínas y fibra, y es un platillo que se sirve cotidianamente en muchas regiones de México, más en zonas rurales, apenas sudados (como los presento) en tamales, en sopas, en tacos con requesón, en ensaladas, etc.

A continuación, les presento la receta de los Quintoniles.

Quintoniles al vapor

 

Ingredientes

500 gramos de Quintoniles

½ taza de cebolla picadita

1 ajo grande picadito

3 cucharadas de aceite de oliva

½ taza de queso fresco desmenuzado

1 rama de epazote

Procedimiento

En una olla de barro calienta las 3 cucharadas de aceite de oliva, añade la cebolla y el ajo.

Cuando esté transparente, añade los quintoniles. Ayúdate con dos cucharas para darle la vuelta mientras se va cocinando, y tapa.

Agrega sal y pimienta. Eso ayudará a que haga agua.

Debe de cocinarse por 20 minutos, siempre dando vuelta para que se cocine parejo.

Para servir, desmorona queso por encima.

Los preparé pensando en mi Pollo Jalapeño, y resultaron una exelente guarnición.