Sencillita la receta, y con un sabor delicado.

No te lo esperas, porque amenaza picar muchísimo. Tanto que no me animé a sumergir el total de mis huevitos revueltos en la salsa.

Preferí presentarlos con la salsa por un lado. Pero oh sorpresa, el chile serrano asado pica menos. Nada como para que se confíen, al menos que sean del estado de Veracruz (me consta que comen mucho picante).

En mi versión, frío la salsa y la pongo en la mesa. Va la receta

Salsa de epazote y chile

Ingredientes:

2/3 de taza de agua
6 chiles serranos asados hasta que estén suaves, toscamente picados
1/3 de taza de epazote picado, muy apretado
Sal al gusto
Aceite
4 huevos grandes

Procedimiento:

Para los chiles serranos asados, colócalos en un comal a fuego bajo, sin aceite. Dales la vuelta de vez en cuando, hasta que queden bien asados.

Pon en la licuadora los chiles bien picados y el epazote. Licúalos muy bien. Vacía la mezcla en un recipiente con una cucharadita de manteca de cerdo. Procura que no esté muy caliente, porque el olor del chile se levantará y te hará toser. Fuego bajo. Debe de reducir un poco. Si requiere un poco más de sal, añádela.

Prepara los huevos revueltos a tu gusto. Sírvelos con frijolitos de la olla y una rebanada de queso fresco. La salsa, por un lado.

Esta salsa la puedes ocupar para huevos revueltos, para taquitos de queso fresco, incluso para una carne asada. Es deliciosa.

Una receta más de mi libro Cocina Esencial de México.

En una olla añade una cucharadita de manteca de cerdo (si prefieres aceite, ok). Con el fuego bajo añade